sábado, 1 de diciembre de 2012

Doctrina Acerca de los Àngeles


Moradas
            Siempre se ha entendido que la palabra “moradas” significa el lugar donde habita regularmente una persona.  El Señor Jesucristo  no tenía una morada aquí en la tierra. Él mismo dijo: “Las zorras tienen guaridas,  y las aves del cielo nidos;  mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar su cabeza” (Mateo 8:20) y Pablo, quien imitaba a su Señor, declaraba  que “no tenemos morada fija”  (1 Corintios 4:11). Por tanto, ninguno de los creyentes tiene una morada aquí en la tierra, pues la que corresponde al Hijo de Dios está en los cielos (cf. Juan 14:2; 17:5), por lo tanto, a los hijos adoptados por causa de haber creído en la obra del Señor Jesucristo, también le corresponde estar allá: esa es nuestra verdadera morada (2ª Corintios 5:1).
            De igual modo, la morada de los “ángeles escogidos” se encuentra en el cielo, al servicio de Dios. Mediante el uso de la frase "los ángeles que están en el cielo" (Marcos 13:32) Cristo afirma definitivamente que los ángeles habitan las esferas celestiales. Pablo expresa  que aun si viniese “un ángel del cielo” (Gá. 1:8)  o de las moradas celestiales  con un evangelio diferente, no debemos creerlo.  Otra expresión  que se usa para dar idea de las moradas es la expresada por Pablo a los de Éfeso: “Toda la familia en los cielos y en la tierra” (Efesios. 3:15).
            Tenemos otra expresión al hogar celestial en la oración modelo que el Señor enseñó: “Hágase tu voluntad, como en el cielo…” (Mateo 6:10). En el hebreo, el vocablo el cielo está en el plural, o sea los cielos. La Biblia habla de tres cielos, siendo tercero, el cielo de los cielos, la misma morada de Dios y donde ha estado eternamente Su trono.
            El  Modelo del Tabernáculo de Moisés (Hebreos 8:5) es una imagen del modelo que se mostró en monte cuando estuvo cuarenta días (Éxodo 25:40). De acuerdo al escritor de hebreos, el diseño del Tabernáculo compuesto por el Atrio, el Lugar Santo y Santísimo nos habla  del cielo (hebreos 4:14; 9:24).
            En los lugares celestiales, según la Epístola a los Efesios (6:12), están los principados y potestades, una compañía de innumerables ángeles. Sus moradas están en esos lugares celestiales. El Dios que los creó, que los hizo espíritus apropiándoles cuerpos conforme a sus naturalezas espirituales, tiene que haberles dado también sus habitaciones.
            También es significativo, y no sin razón, que la frase "los ejércitos del cielo" quiere decir tanto las estrellas y los ejércitos angélicos. "Jehová de los ejércitos" también tiene ese significado doble, porque Él es Señor de las estrellas y Señor de los ángeles (Gen 2:1; Deuteronomio 4:19; 17:3; 2 Reyes 17:16; 21:3,5; Nehemías 9:6; Sal 33:6).

Ministerio de los Ángeles
            Existen 273 referencias a los ángeles en la Biblia y son en gran manera son narraciones de su actividad a raíz de un mandato divino o en el apoyo de los creyente, y en ellas se revela un amplio campo de hechos notables. Lo más importante no es su relación con los habitantes terrestres, sino su servicio a Dios (Apocalipsis 4:8; Isaías. 6:3; Salmo 103:20; 148:1,2).        
            La humildad  de los ángeles es sugerida por su manera de cubrirse los pies (Isaías 6:2) ante la presencia divina.
            Para los ángeles, el nacimiento, la vida, la resurrección y la ascensión de Cristo era una realidad estupenda. No es cosa de poca consecuencia que Cristo  mostrar que estaba en la tierra y “fuese visto de los ángeles” (1ª Timoteo 3:16).
            Encontramos la siguiente paradoja con respecto a los ángeles y a los hombres que debemos tener en cuenta en nuestra vida de creyentes. Esta es: en el Antiguo Testamento a veces se les denomina a los Ángeles como “hijos de Dios”, mientras que los hombres son llamados siervo de Dios; y en el Nuevo Testamento esto se ve al revés: los ángeles son los siervos y los cristianos son los hijos de Dios.
            ¿Por qué?
            En el Antiguo Testamento el hombre se ocupa con bendiciones terrenales y el ángel es siempre superior a ellos; mientras  que en el Nuevo Testamento, la Iglesia es celestial, porque el creyente es constituido en hijo de Dios por obra del Señor Jesucristo, y así los ángeles son inferiores con relación a los santos, cuyo estado final es de exaltación en Cristo.  Ponemos el siguiente ejemplo: es como un príncipe de cuatro años; es menor casi en todo sentido a los ministros de estado,  menos en ser hijo del rey y potentado futuro  (1 Corintios 6.3).
            Básica y esencialmente los ángeles buenos son siervos (Hebreos. 1:1-14). Dios los manda para servicio o ayuda (gr. diakonian) a los creyentes, y al servir así los ángeles funcionan como los mensajeros sacerdotales (gr. leitourgika pneumatata) en el templo-universo de Dios.
            Realicemos un listado con los ministerios que realizan los ángeles:
a)      Con relación a Dios
El ministerio principal de los ángeles es adorarlo y alabarlo a El.
·         Lo alaban (Salmo 148:1–2; Isaías 6:3)
·         Lo adoran (Hebreos 1:6; Apocalipsis 5:8–13)
·         Se regocijan en lo que El hace (Job 38:6–7)
·         Le sirven (Salmo 103:20; Apocalipsis 22:9)
·         Se presentan delante de El (Job 1:6; 2:1)
·         Son instrumentos de los juicios de Dios (Apocalipsis 7:1; 8:2)
b)      Con relación a nuevas épocas.
Los ángeles parecen estar más activos de lo común cuando Dios instituye una nueva época en el curso de la historia.
·         Ellos se unieron en alabanza cuando la tierra fue creada (Job 38:6–7)
·         Ellos participaron en la data de la ley Mosaica (Gálatas 3:19; Hebreos 2:2)
·         Ellos estuvieron activos en el primer advenimiento de Cristo (Mateo 1:20; 4:11)
·         Ellos estuvieron activos durante los primeros años de la iglesia (Hechos 8:26; 10:3, 7; 12:11)
·         Ellos tomarán parte en los eventos concernientes al segundo advenimiento de Cristo (Mateo 25:31; 1 Tesalonicenses 4:1)
c)      Los Ángeles en la Vida de Señor Jesucristo
·         La Anunciación de Juan el Bautista (Lucas 1:5-25)
·         La Anunciación del nacimiento del Señor (Lucas 1:26-38)
·         El ángel puso el nombre del Señor (Lucas 1:31; 2:21)
·         Confirma a José el origen del hijo de María (Mateos 1:20)
·         En el nacimiento (Lucas 2:8-15)
·         En la huida a Egipto (Mateos 2:13)
·         En el regreso desde Egipto (Mateos 2:19-20)
·         En la tentación (Mateos 4:1-10; Marcos 1:12-13; Lucas 4:1-13)
·         En Servicio (Mateos 4:11b; Marcos 1:13d)
·         Expulsó a los demonios de personas
·         En su agonía (Lucas 22:43)
·         En su resurrección (Mateos 28:2-6; Marcos 16:5-8; Lucas 24:4-7;  Juan 20:11-12)
·         En su Asunción (Hechos 1:10-11)
d)     En Su segunda venida del Señor
·         El Rapto. La voz del arcángel se oirá en el traslado de la iglesia (1 Tesalonicenses 4:16).
·         Ángeles Lo acompañarán en Su segunda venida (Mateo 25:31; 2 Tesalonicenses 1:7).
·         Juicio. Ángeles separarán el trigo de la cizaña en Su segunda venida (Mateo 13:39–40).
e)      Con relación a las naciones
·         Con relación a la nación de Israel.
Miguel, el arcángel, especialmente guarda a Israel (Daniel 12:1).
·         Con relación a otras naciones
                                i.            Ángeles velan sobre los gobernantes y las naciones (4:17) y buscan influenciar a sus líderes humanos (10:21; 11:1).
                              ii.            Durante los años venideros de la Tribulación, los ángeles van a participar en la administración de los juicios de Dios (Apocalipsis 8–9; 16).
f)       Con relación a los Injustos.
·         Ángeles anuncian juicios inminentes (Génesis 19:13; Apocalipsis 16:1).
·         Ángeles infligen juicios sobre ellos (Hechos 12:23; Apocalipsis 16:1).
·         Ángeles separarán los justos de los injustos (Mateo 13:39–40).
g)      Con relación a la Iglesia
i.        Ministerio básico
Básicamente, los ángeles ayudan a los creyentes (Hebreos 1:14).
ii.      Ministerio antecedente
Ángeles han tenido a su cargo comunicar y revelar el significado de la verdad de lo cual la iglesia se aprovecha hoy en día (Daniel 7:15–27; 8:13–26; 9:20–27; Apocalipsis 1:1; 22:6, 8).
iii.    Ministerios específicos
·         Peticiones de oración. Ellos traen las respuestas a las oraciones (Hechos 12:5–10).
·         Salvación. Ellos ayudan en ganar a las personas para Cristo (8:26; 10:3).
·         Observación. Ellos observan el orden, trabajo, y sufrimiento cristiano (1 Corintios 4:9; 11:10; Efesios 3:10; 1 Pedro 1:12).
iv.    Ministerios específicos
·         Animo. Ellos dan aliento en tiempo de peligro (Hechos 27:23–24).
·         Presentes en la muerte. Ellos cuidan de los justos a la hora de morir (Lucas 16:22).
·         Liberta.  Pedro es libertado de la cárcel (Hechos 12:7–10)

            No hay certeza de que los ángeles continúen funcionando en todas estas maneras a través de las edades. Pero ellos sí llevaron a cabo estos ministerios y posiblemente continúan haciéndolo, aunque no estemos conscientes de ellos. Por supuesto, Dios no está obligado a usar ángeles; Él puede hacer todas estas cosas directamente. Pero aparentemente escoge emplear el ministerio intermediario de los ángeles en muchas ocasiones. Somos por cierto un teatro en el cual el mundo, los hombres, y los ángeles componen el auditorio (1 Corintios 4:9).  Hagamos una buena presentación para ellos tanto como para el Señor delante del cual todas las cosas están desnudas y abiertas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario