domingo, 29 de octubre de 2023

Figuras de Cristo (22)

 

Más figuras aún del Señor Jesucristo

W.A. Deans


Hemos llegado al final de este libro y hemos visto muchas figuras del Señor Jesús descritas en el Antiguo Testamento. El Nuevo Testamento nos muestra de qué manera éstas figuras hablan de nuestro Salvador. Esto nos ayuda a aprender más acerca del Señor Jesucristo, su vida y su muerte.

No solamente pensamos acerca de las figuras del Señor Jesús, sino también de las verdades que ellas nos enseñan acerca del Señor. En Hebreos 10:1 leemos que la ley judía no era un modelo completo y fiel de las cosas reales. Así que, prosigamos en el entendimiento y significado de la ley y de otras figuras del Antiguo Testamento y aprendemos las ver­dades que nos enseñan del Señor Jesús. Recuerde que él vino a la tierra para cumplir la ley y no para destruirla, Mateo 5:17.

Hay otras figuras del Señor Jesús en el Antiguo Testamen­to:

Jonás, en el vientre del pez por tres días y tres noches nos hace pensar del Señor en la tumba, Mateo 12:40.

Booz, era pariente del primer esposo de Rut. Él redimió a Rut, así mismo, el Señor se hizo hombre para redimir a la iglesia y hacerla su esposa, Rut 4:1,6,9,10.

Rahab ató un cordón rojo a su ventana en el muro de Jericó para salvarse a sí misma y a su familia. Este cordón nos recuerda de la sangre del Señor Jesús, a través de la cual recibimos salvación y paz, Josué 2:21; 6:17-25.

Cuando los israelitas cruzaron el río Jordán, caminando sobre su lecho seco, ellos colocaron doce piedras en el sitio donde los sacerdotes estuvieron parados. Más tarde, el agua del río cubrió estas doce piedras. Ellas son una figura del Señor Jesús que soportó la ira de Dios por nosotros. Lea Salmos 42:7. Los israelitas tomaron doce piedras del río y la apilaron en la ribera del río Jordán, en tierra de Canaán. Estas tomaron el lugar de las que habían sido puestas en el río anteriormente. Estas cosas nos hacen pensar del Señor Jesucristo, redimiendo a su pueblo de la ira de Dios.

Anteriormente, en el viaje a través del desierto, los israelitas llegaron a Mara, un lugar donde el agua era amarga. Éxodo 15:22-25. Estaban todos muy sedientos, pero no podían tomar de esa agua; así que ellos se rebelaron con­tra Moisés. Moisés oró y Dios le mostró un árbol. Moisés lo cortó y lo lanzó al agua amarga la cual se convirtió en agua dulce. El pueblo bebió y vivió. ¡Qué figura de la cruz de Cristo, a través de la cual recibimos vida eterna!

La Biblia está llena de hermosas verdades y de preciosos tesoros. ¡Continuemos buscando en ella las riquezas espirituales que llenarán nuestras almas y las de otras per­sonas, de gozo y paz, para la gloria de nuestro Salvador, el Señor Jesucristo!

El autor estaba realizando buen éxito en el mundo de negocios en California cuando el Señor lo llamó al África. Desde entonces ha estado sirviendo al Señor con la enseñanza de la Palabra de Dios en in­glés, francés y por lo menos dos idiomas del África.

Este librito con figuras de Cristo será como un manjar en sus estudios del Antiguo Testamento y enfocará su vista en el Señor Jesús.

(Todos los artículos expuestos fueron tomados del libro “Figuras de Cristo” publicados por “Publicaciones Cotidianas”)

No hay comentarios:

Publicar un comentario